Quantcast
Channel: conductores – El Pasajero
Viewing all articles
Browse latest Browse all 27

Latinos en Metro: Guadalupe Franco da el visto bueno a los nuevos operadores de autobuses

$
0
0

Guadalupe Franco es instructor de línea en Metro.  Su experiencia de 27 años en la agencia lo ha convertido en un experto del volante. Su trabajo es inspeccionar con mucho cuidado cada maniobra que realizan los nuevos conductores de autobuses en sus primeras semanas trasladando pasajeros por las calles de Los Ángeles.

“Después de que los entrenan para conducir, los mandan a las divisiones y aquí nosotros continuamos el entrenamiento por cuatro semanas para que agarren más experiencia y confianza”, explica.

Eso significa que por esas cuatro semanas el instructor de línea acompaña al nuevo operador en su recorrido diario, le hace recomendaciones para que se le facilite su trabajo y luego lo suelta a las calles.

“Vamos parados al pie de ellos observando para que no tengan accidentes y recojan bien a la gente”, explica.

“Esto me gusta mucho porque puedo entregar parte de lo que aprendí todos estos años y poder pasárselos a los nuevos choferes para que continúen y hagan buen trabajo”, dice Guadalupe.

Franco comenzó en la agencia como operador de autobuses cuando Metro era RTD. Ahora trabaja en la División 18.  Además de darle el visto bueno a los nuevos conductores, también sale a las calles en su propio camión.

No recorre una ruta precisa todo el tiempo, ya que los operadores de autobuses cambian cada seis meses de recorrido.

Por el momento su ruta es la 111 que va por la Florence Ave y que comienza en el Aeropuerto de Los Ángeles hasta la ciudad de Norwalk. Su jornada es de las 4 AM a las 12PM y durante ese período hace dos vueltas llevando y trayendo pasaje.

“Me gusta mucho el contacto con la gente. Trato de ser muy puntual y eso les gusta a mis pasajeros llegar a tiempo para las conexiones con otras rutas y no tengan que usar mucho de su tiempo esperando”, platica.

Para Franco conducir autobuses no era nada nuevo ya que antes de llegar a Metro trabajó para una empresa de autobuses escolares.

“Me gustó Metro porque acá pagaban mejor, pero una vez aquí me di cuenta de las oportunidades que tienen los empleados para superarse”, dice.

Sin embargo, no se escapa de la gran responsabilidad que lleva conducir un vehículo de esta magnitud.

“Es muy grande. Hay que cuidar de no chocar, hay que cuidar que no se te caigan los pasajeros, hay que cuidar que no le den a uno infracción los policías. Si pones todo eso junto es mucha responsabilidad, pero uno aprende y después todo parece más fácil”, agrega.

A Guadalupe Franco siempre le apasionó conducir. Aprendió a los 8 años. Su papá le enseñó y a veces le permitía conducir su carro y un tractor que la familia tenía.

Eso fue cuando vivía en su tierra natal, Tepatitlán, Jalisco. El conductor llegó a Estados Unidos en 1977. Su padre lo hizo en 1967, pero regresaba a México. Sin embargo, “les puso en la mente” a sus hijos que un día tendrían que inmigrar al norte en busca de una vida mejor.

Y los consejos de su padre surtieron efecto. Franco tiene un trabajo estable y una vida mejor. Su tiempo libre lo disfruta al máximo. Tiene un jardín grande donde planta tomates, cilantro, calabazas y otras legumbres para consumo de la casa.

“Salgo temprano del trabajo y me voy a casa. Mi esposa ya tiene comida lista y después de comer me voy a mi jardín a regar mis plantas…. A veces solo miro mis flores y plantas y eso me hace feliz, cuenta Franco, quien tiene 4 hijos ya mayores de edad.

Pescar es otro de sus pasatiempos. Algunas veces toma el barco de Long Beach o Redondo Beach y se embarca en la aventura de la pesca.

A pesar del tiempo, no se olvida de su tierra natal. Ya es tradición que viaje al país del sur a celebrar las fiestas de su pueblo y a convivir con su familia que reside allá.

Sus planes en Metro son trabajar dos o tres años más para luego retirarse y disfrutar de los frutos de su trabajo.


Viewing all articles
Browse latest Browse all 27

Trending Articles